Nuestro mundo GAY
Curiosidades, Notas, Consejos,
vivencias, relatos de la vida diaria!!
MI HISTORIA LGBTTTI
Y de fondo “Engañada por ti” de Lupita (muy buena la rola), y es cuando veo en una
cartulina una pintura de la bandera más bella que he visto en toda mi vida; la bandera de arcoíris; fue cuando decidí escribir
para ustedes; me gustaría contarles desde los colores de arcoíris mi historia LGBTTTI.
Rojo
El rojo siempre ha sido uno de mis colores favoritos, desde que era pequeño he tenido mucha ropa
roja; es un color que me hace sentir sexy, siento que soy una persona llamativa inteligente e intensa. Recuerdo una tarde
de junio de 2001, era una tarde como cualquiera, pero ese día me llevaría a tener la llave para un calvario, que a mis 22
casi 23 años ya he dejado atrás.
Mi amiga Elizabeth me invitó a comer y a conocer a un chico, con el cual ella pretendía llevar
un nuevo romance; a veces pienso que a mis 13 años en ese tiempo, lo único que me interesaba era salir, comerme el mundo y
abrir muchas puertas de la vida; lo único que no sabía es que ese día compraría la llave de una puerta totalmente desconocida
por mí.
Su nombre era Benjamín (el paso del tiempo ha borrado casi todo su rostro y su apellido de mi mente),
era un hombre alto, joven, de 19 años, con un olor muy especial (florar diría yo), una piel como seda, muy suave y limpia;
cuando llegamos en donde él, rozar su palma con la mía, fue como un choque eléctrico, que hasta hoy comprendo; era el llamado,
un llamado a mi sexualidad.
Esa tarde, comimos los tres, mi amiga, el chico Benjamín y yo; fue una tarde muy especial, la plática
hizo que se fueran las horas y horas, el aburrimiento no cabía en mi ser; y ver sus ojos dirigiéndose a los míos eran tan
extraño pero dulce a la vez.
Al llegar a casa, no podía dejar de ver eso ojos verdes, tan profundos, como cuando el mar espera un naufragio, para guardar en él, secretos e historias que se hacen leyendas; toda
la madrugada esos ojos se me revelaban, sin poder conciliar el sueño, sólo me levanté, bañé, desayune y dirigí mi cuerpo de
nuevo a la escuela.
Al llegar, mi novia esperaba por mí en la entrada, para darnos un beso, como era de costumbre;
llegué en donde estaba ella, y los ojos verdes me seguían y los veía en los ojos de ella y en todos los ojos con los que tenían
contacto los míos. Esos ojos me siguieron por 3 semanas hasta que los volví a ver frente a frente; ahora el escenario era
una fiesta de la secundaria; el baile, los malos intentos de mis amigos por fumar y tomar convirtieron eso en un asco; mi
amiga Elizabeth, el choco Benjamín y yo salimos de allí para ir al parque; otra tarde maravillosa en resumen.
Esos ojos verdes no los volví a ver después de otras 3 semanas, en las cuales me preguntaba por
qué me agradaba estar tanto con él; mi respuesta fue: “Quisieras ser como él, grande, libre, rodeado de mujeres y ser
un macho chingón”.
Era una mañana como a las 6:40 (no recuerdo bien)
y yo en la esquina de mi escuela, esperando a mi novia para entrar juntos a clases; pero ella no llegaba, así que cuando decidí
a empezar a caminar hacía ese recinto de conocimiento, aparecieron esos ojos verdes con una sonrisa tan linda; era el chico
Benjamín, diciéndome que me fuera de pinta; que pasaríamos un día super padre y que mi amiga Elizabeth nos alcanzaría en donde
estuviéramos; no lo pensé dos veces y subí a su auto.
Ya estando en el auto, solamente sentí una mano cálida que recorría mi pierna y de repente una
boca sobre la mía; quedé en shok; solo podía ver los ojos verdes bailar de placer, de lujuria, de deseo; mientras que mi cuerpo
temblaba, venían a mi torrentes aires de frío y calor y mi “símbolo de masculinidad” empezó a crecer, mi respiración
se aceleró y algo extraño empezó a surgir de lo más profundo de mí; era el deseo, el placer; no pude dejar de besar esos labios.
No sé dijo nada más después de ese beso; fuimos en donde siempre nos reuníamos, llegó mi amiga,
platicamos y pasamos la tarde en el parque; todo era nubes rosas, destellos de color, vida profunda.
Pasaron 3 días más y el chico Benjamín fue a verme a mi casa, subí a su auto y nos dirigimos a
una fiesta; a tres cuadras del lugar, de nuevo esa mano cálida, pero esta vez esa boca pronunció: “¿Quieres ser mi novio?,
tú me gusta mucho”; mis oídos se llenaron de miedo, de asco, de algo… que me he desecho de eso hasta mis 22 años.
No dije nada, mi boca solamente se dirijo a esa boca y de nuevo el deseo corrí por mí.
No sé cuándo ni cómo, pero en un abrir y cerrar de ojos, ¿ya era novio de un hombre?, ¿qué pasaría
con mi novia?, ¿qué pasaría conmigo?; es cuando me día cuenta que ya tenía en mis manos la mistad de la llave de esa puerta,
que era de un rojo intenso, que me llamaba a entrar en ella.
De allí, los cielos se volvieron grises y las nubes ya no eran rosas, eran rojas, de las cuales
llovían cruces y cuchillos que rasgaban mi alma, día tras día que avanzaba. De repente un tornado paso encima de mí, arrebatando
de mis manos a mi novia, mi amiga Elizabeth, mis demás amigos y amigas; pero el consuelo que tenía era esa tarde de motel.
El motel era frió, oscuro, con un olor a caño; fue allí cuando el rojo de mi
sangre marcó mi destino; mi cuerpo sangraba, y no por los cuchillos que me caían de eso cielo gris, sino por el filo e inmensidad
de esos ojos verdes; al principio era doloroso, pero conforme el chico Benjamín besaba mi cuello, ese dolor, ahora era el
más puro placer y la sangre pasó a ser lo de menos. Después de esa tarde de motel, no lo volví a ver después de 3 semanas;
y cuando por fin volví a ver esos ojos verdes, sólo me dijeron adiós con una carta escrita en una hoja verde.
Esa carta completó mi llave para poder entrar a esa puerta roja, en donde mi calvario empezaría
para que yo lo viviera….
Mas de un
padre de familia debe haber sentido el clasico "tragame tierra" cuando le ha tocado responder las preguntas de sus hijos sobre
la homosexualidad. "¿Porque se besan entre hombres?", habra dicho una vocecita...
Artículo publicado en El Comercio..
Viendo las imagenes
del recientemente legalizado matrimonio gay en México. ¿Cómo abordar este espinoso tema sin hacer desmesurados juicios de
valor? ¿Que deben hacer los padres para explicar situaciones que son cada vez mas frecuentes?
Recomiendan no ocultar
la realidad a los niños, ni mentirles sobre el tema.
Las respuestas las deben encontrar en casa
Para la psicologa
y asesora de sexualidad en Apropo, Trixsi Vargas, la homosexualidad esta presente en lo cotidiano; por ello recomienda no
ocultar el asunto, ni tratar de dejarle la labor a los profesores o a otro miembro de la familia. "La explicacion varia segun
la edad de los chicos. Sin embargo, hay que recordar que ellos adoptaran una actitud (positiva o negativa) de acuerdo a como
actuen sus padres", afirma. Hablar del cariño que existe entre hombres y mujeres es un buen inicio. "Hay que decirles que
eso es lo que se espera. Pero tambien informarles que, en ocasiones, hay personas que se enamoran de gente de su mismo sexo
y que eso no tiene nada de malo", agrega Vargas. Para aquellos a los que la idea de pronunciar esta palabras les eriza la
piel, les aconsejamos relajarse. El nerviosismo o la tension son captados por el niño. Esto puede ser contraproducente. "Los
chicos de 13 años, por ejemplo, querran saber mas que uno de 7 años. Y si el padre/ madre no sabe, entonces se coge una enciclopedia
y ambos la leen", recomienda la experta.
Adios Mitos
La oportunidad de enseñar la tolerancia es enorme cuando
se habla de homosexualidad. Ser "gay" en la sociedad significa una lucha constante por ganar mas derechos, por lo que hablar
con puberes y jovenes sobre el tema no creara una curiosidad malsana, tal como muchos adultos piensan. "Los padres creen que
si no hablan sobre el tema, no les va a interesar. Pero no es asi, un niño se da cuenta de todo. Y es mejor despejar sus dudas
en casa, siempre que ellos nos pregunten". Esta claro que los padres tienen en sus manos el chance de romper la cadena del
oscurantismo, del miedo y del prejuicio.
Con Niños de 6 a 8 años:
Ellos necesitan respuestas rapidas y naturales.
Por ejemplo, si un niño ve a dos mujeres abrazadas en al calle y pregunta porqué, hay que explicarles que ellas se quieren
mucho y que son muy amigas.
Con chicos de 7 a 11 años:
Ellos esperan mas que una respuesta simple y repreguntan.
Por ello,es conveniente informarse primero con algun libro sobre sexualidad. Por ejemplo,luego de explicarles el cariño entre
personas del mismo sexo vendra la repregunta: "¿Y por que la gente los mira raro?". Entonces se les debe de explicar que,
por ser algo poco común, la gente sigue asombrandose.
Con puberes y adolescentes
Ellos estan expuestos a todo
tipo de información (TV o Internet) y conviene que hallen respuestas en casa antes que con los amigos. Por ejemplo, el (la)
adolescente puede creer que es homosexual porque siente admiración por otro (a) joven de su mismo sexo. Alli habria que explicarle
que simplemente es una etapa transitoria, en la que se buscan modelos a seguir. La identificación, a esta edad, no es mala.
Para muchos, la única
preocupación en los fines de semana es decidir tiempo a qué lugar van a ir a bailar, que ropa van a usar y con quién van a
salir, no importa si tengan veinte o cuarenta años. Sin las responsabilidades de una familia tradicional, muchos de nosotros
tenemos la libertad de tomar muchas decisiones sin la necesidad de involucrar a otras personas. Esto puede hacer que muchos
seamos egoístas y no sepamos como compartir efectivamente nuestro tiempo con las personas que queremos. O que no sepamos como
negociar apropiadamente cuando tenemos intereses u opiniones distintas de nuestras parejas o amigos. O estemos tan acostumbrados
a hacer lo que queremos que el iniciar una nueva relación puede poner en peligro nuestra libertad, una de las pocas ventajas
de la soltería. ¿Será quizás esta una de las razones por las cuales a muchos de nosotros nos cuesta encontrar pareja o mantenerla?
Analicemos cada una de estas posibilidades.
El quejarse por la falta de tiempo no es una cuestión solamente de los
gays pero la diferencia es que aunque tengamos agendas muy ocupadas no tenemos las obligaciones familiares, especialmente
con niños lo cual nos permite poder pasar más tiempo en el gimnasio, con amigos o en bares. Al no tener la responsabilidad
de una familia muchos se dedican a divertirse pensando solo en sexo, drogas y alcohol.
Estamos acostumbrados a hacer
lo que queremos. Muchas personas de nuestra comunidad hacen grandes berrinches cuando no se hace lo que quieren. La incapacidad
de poder contentarse aunque no se haga lo que nosotros queremos es algo totalmente difícil de hecho muchas discusiones que
comenzamos con amigos o nuestra pareja son precisamente por que siempre queremos que se haga lo que decimos. La mayoría hace
hasta lo imposible para lograr lo que quiere, hacemos lo que sea para acostarnos el chico que nos gusta, para comprarnos la
ropa que esta de moda, para seguir viéndonos jóvenes y bellos.
Finalmente la dificultad de mantener una pareja está
íntimamente ligada al egoísmo y a la dificultad de negociar. Para una persona que está acostumbrada a hacer lo que quiere,
el estar en pareja, en vez de enriquecer su vida, y ver en la relación una posibilidad de compartir todo lo que le ocurre,
puede llegar a ser un obstáculo para su agenda de actividades. Puede tener miedo a que el estar en pareja lo limite para hacer
lo que quiere. Y es verdad, estar en pareja significa trabajo, significa crecer con otra persona, tomar decisiones en conjunto
y compartir tanto lo apasionante como lo aburrido, lo especial y lo rutinario. Pero lo más importante es compartir nuestro
amor. Con nuestra pareja, amigos y familiares. Al final de cuenta, si no estamos en este mundo para dar y recibir amor, ¿Cuál
es su sentido? . Y ahora, ¿crees que los gays son inmaduros?..............
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